La pregunta ya no es si debemos invertir en seguridad, sino cómo podemos maximizar la efectividad de esta inversión. Aquí, la respuesta está en la convergencia entre la tecnología predictiva y el control de acceso inteligente. No estamos hablando simplemente de instalar cámaras de seguridad tradicionales o contratar más guardias; nos referimos a implementar un ecosistema de seguridad integrado que combina inteligencia artificial, análisis predictivo y respuesta humana capacitada.